Se veía venir. desde mediados de octubre, cuando la criptomoneda había abandonado la zona de confort de los 10 Mil dólares por unidad o 10k para simplificar, hubo una serie de especulaciones que llegaría sin parar hasta los 100 mil o 100k a finales de éste año.
Entonces fue cuando muchos ambiciosos de multiplicar sus tenencias de dinero, se dieron a la tarea de hipotecar sus bienes para abandonar la moneda fiduciaria, y entrar de lleno a la moneda digital a cambio de vivir bien en sólo 3 meses.
La realidad fue otra, conforme los tenedores de criptomonedas que no apostaron por la diversificación, se dieron cuenta de que hipotecar y empeñar fue un error por perseguir una quimera cómo el bitcoin.
Si bien es cierto que se necesita de una moneda que ponga fin al dinero de papel actualmente ocupado en varias economías, también es cierto que se requiere de una estrategia, para implementar una moneda estable que nos permita aventarnos al mercado de las criptomonedas sin el riesgo de que nuestras economías y sueños se vean hipotecados.
hoy esa quimera ha mostrado su forma y ha demostrado que el perseguir unicornios fue un error mas de la humanidad ambiciosa, y que debe de volver a la realidad dónde pueda recuperar su poder adquisitivo con una nueva alternativa al dinero fiduciario tradicional.
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